Transcripción |
[...] Dijeron que, por cuanto de mandato de su Señoría Ilustrísima y común sentir de todo este cabildo se encargó al señor chantre examinase a los capellanes de coro que no fuesen de orden sacro, y a los acólitos --de suficiencia--, y a los mozos de coro y músicos de música --con asistencia del maestro de capilla y, juntamente, de suficiencia-- para dar las providencias necesarias para el mayor culto divino y mejor servicio de esta Santa Iglesia, y habiéndolo ejecutado dicho señor chantre, ha informado: que algunos de los capellanes de coro y acólitos necesitan de aplicarse más para perfeccionarse en la latinidad; que, de los mozos de coro, Juan de Herrera, Agustin de Silva y Joseph Moreno se hayan muy cortos en la gramática y música; que los demás, y el músico, saben así música como gramática, cada uno en su línea, [y] que con el ejercicio y continuación ambas cosas adelantarán. Que visto dicho informe, y del noticiado a su Señoría Ilustrísima, dicho ilustrísimo señor y unanimi consensu este cabildo resolvió se expelen a Juan de Herrera, a Joseph Moreno y Agustin de Silva. Y que a todos los demás se notifique asistan con puntualidad a la iglesia, al estudio y música, los destinados. Y que estén entendidos que dentro de cuatro meses se han de volver a examinar y el que no hubiere adelantado se ha de expeler. Y que todos los días, desde las dos hasta las tres de la tarde, asistan a la escoleta y, el maestro, a ella, en una pieza de esta Santa Iglesia. [...] |